Mente

La felicidad no depende del placer

El secreto de la felicidad
La felicidad real no es una vida de placeres: depende de tu capacidad de superar los obstáculos de la vida y de disfrutar del proceso de crecimiento personal.

Los griegos tenían una palabra con la que definían una vida bien vivida, una vida en la cual el ser humano florece y llega a la madurez y la felicidad: eudaimonia.

Sin embargo, eudaimonia no es una vida de placer (aunque lo incluye); es una vida de esfuerzo, es una vida de impulsarte tú mismo para encontrar el éxito. Es una vida llena de la felicidad que viene de conseguir algo difícil pero realmente importante, con esfuerzo.

Eudaimonia resumiría muy bien las frases cliché que dicen que las mejores cosas de la vida no vienen de tu zona de confort; que las cosas buenas en la vida son por las cuales tienes que esforzarte; que sin dolor no hay ganancia.

Una vida eudamonística significa que nunca acabas de mejorarte; que nunca llegas a un punto en el cual te puedes dormir en tus laureles. Eudaimonia significa que constantemente estás poniéndote nuevos objetivos y trabajando en desarrollar nuevas habilidades. Este es el precio de la felicidad que vale, la que te sirve para ser cada día un mejor ser humano en todos los aspectos.

Pero significa también que te encontrarás con decepciones, errores, equivocaciones y momentos de soledad.

La teoría del desarrollo moral

El estoicismo es una corriente filosófica que promueve el fin último de vivir una vida virtuosa. Esto significa alcanzar lo más cercano a la perfección en las capacidades humanas que hacen la diferencia tanto en desarrollo personal como en ayudar a los demás, y a dejar un legado que le sirve a las siguientes generaciones.

Sin embargo, la vida estoica y eudaimonística, no es una vida de pasteles y arcoírises. No puede serlo. Vivir virtuosamente desde el punto de vista estoico significa el dulce placer de llegar a tu cama después de un día duro; es la satisfacción de saber que conseguiste algo importante y que te esforzaste a ti mismo para ser la mejor persona que puedes ser.

El secreto de la felicidad

Esto es muy diferente al masoquismo, pero para algunos suena como a esfuerzo innecesario por el puro placer de sufrir. Es un concepto muy distinto, pero difícilmente se puede llegar a la virtud sin tener que superar obstáculos que te sacan de tu zona de confort, que te estresan y te hacen sufrir.

Madurez antes de la felicidad

Se podría decir que llegamos a la madurez cuando somos personas adultas. Podríamos asegurar que la gente madura por el simple hecho de que ya no son unos adolescentes en edad. Nada más alejado de la realidad.

Según el modelo de desarrollo moral de Lawrence Kohlberg, a los 36 años solamente el 13% de la población ha alcanzado el estado adulto mental, es decir la verdadera madurez. El resto siguen en la adolescencia.

Y es que una persona puede pasar por tres estados mentales/morales en el trascurso de su vida.

Las etapas de maduración en la vida

La primera es la infancia, etapa en la cual básicamente busca el placer a toda costa, es decir solamente las cosas o acciones que le hacen sentir bien: comida, juguetes, abrazos, dulces, que le cumplan sus caprichos. Básicamente un niño funciona con esta regla: busca lo que te consiga placer y evita lo que te consiga dolor. Por esto precisamente en esta etapa es muy importante fomentar en los niños el autocontrol.

La segunda etapa, la adolescencia, llega cuando esa persona se da cuenta de que en el mundo existen reglas y principios; que no solamente porque quiera algo lo va a tener, y que lo que hace o deja de hacer tiene sus consecuencias y aprende a comportarse bajo ese supuesto.

Sin embargo la etapa adolescente sigue buscando lo mismo que se busca en la etapa infantil: placer. Pero su regla de funcionamiento básico ha cambiado: “buscar solo cosas que te traigan placer y evitar cosas que te causen dolor puede meterte en problemas; necesitas negociar“.

Rodeados de adolescentes

Como Mark Manson, en su bestseller The Subtle Art of Not Givinga a F*uck elocuentemente lo pone, “la madurez solamente ocurre cuando te das cuenta de que es mejor sufrir por las razones correctas”, en lugar de sentir placer por las razones equivocadas. Aquí es cuando dejas la adolescencia en realidad y pasas al estado de adultez; cualquiera que sea la edad en la que te llegue esta epifanía.

Y como nos daremos cuenta si analizamos el mundo a nuestro alrededor, al resto de las personas y a nosotros mismos, la mayoría no solamente no sale del estado moral adolescente, sino que apenas después de los 30 llegan a esta etapa.

Y esta tercera etapa, la madurez real, es lo que el enfoque mental estoico promueve, y precisamente es la esencia del término eudaimonia: el desarrollo de principios como reglas para pensar y actuar según nuestra personalidad y nuestras circunstancias, independientemente del placer o el dolor; precisamente con lo que se alcanza la felicidad real.

Más sobre la madurez y la felicidad

Ya he tratado la madurez mental en mi blog sobre Branding Personal relacionado con distintos temas, así que te sugiero leer y compartir los siguientes artículos, lo cual te ayudará a conocer más sobre la importancia de los valores, el autocontrol, y más aspectos que fomentan el disfrute de la vida de acuerdo al estoicismo.

Dejar de quejarte te beneficia
Disfruta de las experiencias negativas
El poder de la incomodidad
El valor del autocontrol
La falacia de los valores
Necesitas más estoicismo en tu vida
Responsabilidad Extrema

 

Referencias

TED (2012). The surprising science of happiness | Dan Gilbert. https://youtu.be/4q1dgn_C0AU
Hendricks, S. (2018). How to be happy: Aristotle’s 11 guidelines for a good life. Big Think.
Kohlberg, L., & Kohlberg, L. (1985). Essays on moral development / the philosophy of moral development. San Francisco, CA: Harper & Row.
Manson, M. (2018). The subtle art of not giving a fuck: A counterintuitive approach to living a good life. New York, NY: HarperLuxe.

Nelson Razo

Nutriólogo y divulgador de la ciencia enfocado en salud metabólica y promoción de la salud pública. Experto en branding y marketing digital que disfruta del running, la lectura y la investigación.

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