Como ya hemos abordado en otros artículos, el Síndrome Metabólico es el principio de la mayoría de las condiciones crónicas que cada año son más comunes en todo el mundo, y de hecho son ya la causa número uno de morbilidad y mortalidad.
De estas condiciones, las más conocidas son las enfermedades cardiovasculares y la diabetes, las cuales en conjunto ya son la causa de muerte principal en la mayoría de los países desarrollados y emergentes. Sin embargo, la condición subyacente que fomenta el síndrome metabólico, la resistencia a la insulina producto del abuso en el consumo de calorías provenientes de alimentos basados en carbohidratos ultra procesados, es el detonante de muchas otras enfermedades.
Una de estas enfermedades que en las últimas décadas se esta diagnosticando más seguido en más mujeres, es el Síndrome de Ovario Poliquístico (PCOS), una condición que hasta hace poco se consideraba de origen principalmente genético, y que hasta la fecha es una de las causas principales de infertilidad. En algunos países se calcula entre el 10 y el 20% de las mujeres lo padecen.
¿En qué consiste, por qué se desarrolla, por qué muchas lo pueden tener sin darse cuenta, y cómo puede revertirse naturalmente sin necesidad de medicamentos?
La etiología del Síndrome de Ovario Poliquístico
También conocido como PCOS por sus siglas en inglés, el principal síntoma de este síndrome, por el cual la mayoría de las mujeres que lo padecen acuden al médico, es la irregularidad de del periodo menstrual y la incapacidad de concebir, es decir infertilidad.
Esta infertilidad se debe al desarrollo en los ovarios de quistes que impiden la evolución normal de los óvulos y su migración al útero, lo que además de modificar el ciclo menstrual, impide la concepción. El desarrollo de estos quistes es resultado de la hipersensibilidad a la Hormona Luteinizante (LH) que controla el ciclo ovular.
Por acción de la insulina, esta hipersensibilidad a la LH adelanta el ciclo de vida del óvulo, fomentando la degradación del folículo ovular antes de que este madure, y en lugar de terminar de desarrollarse y salir del ovario, se queda ahí formando un quiste.
Esto sucede con varios óvulos de los tantos que se desarrollan en los ovarios, lo que puede ser detectados por distintas técnicas de visualización médica, y de ahí el termino poliquístico.
Los síntomas que indican PCOS
El cambio o la cesión del periodo menstrual debidos a los quistes ováricos es solamente uno de los varios indicadores que sirven para diagnosticar Síndrome de Ovario Poliquístico. Y aunque es el más importante, al ser este un síndrome, consta también de otras condiciones relacionadas. Y al igual que el síndrome metabólico, cuando una paciente tiene tres de todos estos, se considera que padece de PCOS.
Acné, alopecia, y bello facial. Todos o por separado, estos síntomas están relacionados en las mujeres con PCOS con abundancia de hormonas masculinas o andrógenos.
Hiperandrogenismo. Altos niveles de hormonas masculinas, como estosterona, detectadas mediante análisis de sangre. Esta elevación de testosterona es consecuencia de la reducción de la globulina fijadora de hormonas sexuales (SHBG), lo que sucede a causa de la excesiva insulina.
Anovulación o fertilidad retrasada. Desaparición o retraso del ciclo ovulatorio, producto de las modificaciones hormonales y los quistes ováricos.
Obesidad. En muchos casos, una manifestación directa de la resistencia a la insulina.
Las consecuencias del Síndrome de Ovario Poliquístico
A excepción de la incapacidad de concebir en los casos de mujeres que desean ser madres, el PCOS no fuera una condición muy importante y urgente de tratar si solo implicara acné, algo de bello facial, caída de cabello de la parte superior de la cabeza, y unos kilos de más.
Sin embargo, como una condición relacionada directamente con el Síndrome Metabólico, por si todo lo anterior no fuera suficiente, las mujeres con PCOS tienen mayor riesgo de desarrollar otras condiciones crónicas, entre las cuales están enfermedades cardiovasculares, diabetes, hígado graso no alcohólico (NAFLD), esteatohepatitis no alcohólica (NASH), apnea obstructiva del sueño, enfermedad de Alzheimer y hasta cáncer.
Y la cereza del pastel: el PCOS acarrea no solamente problemas de salud físicos, sino además psicológicos. Es común que quienes padecen este síndrome desarrollen depresión y problemas psicológicos similares como ansiedad. Estas condiciones psicológicas están asociadas tanto a las alteraciones hormonales, como a las alteraciones emocionales resultado de la incapacidad de concebir en el caso de las mujeres que desean ser madres.
Los tratamientos comunes
Aunque cada vez más profesionales de la salud conocen el problema subyacente, la resistencia a la insulina, hasta la fecha el tratamiento para el PCOS consiste básicamente en tratar los síntomas y no el origen de los mismos.
Así, para tratar la infertilidad el médico puede recetar Clomid para aumentar la secreción de hormona estimulante del folículo (FSH) e indicar al ovario que produzca más óvulos. Puede recetar píldoras anticonceptivas para tratar de recuperar el balance hormonal y disminuir algunos de los síntomas del exceso de andrógenos. Y también recetar metformina, para ayudarle a organismo aliviar con el exceso de glucosa, lo que reduce los niveles de insulina.
Y aunque cada caso particular es distinto, por lo que se debe consultar al médico en cualquier caso de posible PCOS, todos estos tratamientos, estudios recientes y casos clínicos ya han demostrado pueden no ser necesarios ni efectivos si tomamos en cuenta que el problema raíz es la resistencia a la insulina en la mayoría de los casos fomentada por una dieta basada en alimentos de alto índice glucémico. Por esto, expertos como el Dr. Jason Fung opinan que «el único tratamiento lógico es reducir los niveles de insulina mediante una dieta baja en carbohidratos».
Revertir el PCOS
Así que, como el autor de The Diabetes Code asegura, no necesitas medicamentos para una condición de la cual entiendes que el origen en nutricional. Por esto, en los últimos años varios estudios han mostrado que reducir drásticamente los carbohidratos, especialmente los de alto índice glucémico como las harinas refinadas, mejora los marcadores que forman parte del Síndrome de Ovario Poliquístico, al punto de revertir la condición en la mayoría de los casos.
De hecho un estudio que ya abordamos, específicamente encontró que una dieta cetogénica mejoró los marcadores de PCOS en unas cuantas semanas.
¿En qué consiste una dieta baja en carbohidratos que sirva para revertir el PCOS? Eso lo trataremos en un próximo artículo.
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